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El oídio es el nombre colectivo que se le da a un grupo de enfermedades causadas por hongos que infectan las partes aéreas de las plantas. Estos hongos son muy selectivos y a menudo infestan una especie de planta seleccionada. Por lo tanto, en cada cultivo puede haber una especie diferente de hongo que cause la enfermedad. Por eso, bajo el nombre de oídio encontramos diferentes nombres de especies de organismos que causan síntomas similares. En España, los hongos más frecuentes asociados al oídio son: Erysiphe, Podosphaera, Oïdium, Leveillula.
Estos hongos pueden causar síntomas en todas las partes aéreas: hojas, tallos, frutos y flores. Además del cultivo de hortalizas y plantas ornamentales, el oídio también se encuentra en los cultivos de frutos rojos y bayas.
A pesar de que casi todos los cultivos son atacados por otras especies de hongos patógenos, la característica común del oídio son las manchas blancas y harinosas, que aparecen con mayor frecuencia en el haz de las hojas. Suelen empezar a aparecer en la parte inferior de la planta. A medida que el hongo se extiende, puede cubrir toda la superficie de la hoja, provocando su amarilleamiento y, finalmente, su desecación. También puede inhibir el crecimiento de toda la planta, provocar el rizado de las hojas y, en el peor de los casos, la muerte de algunas partes de la planta. En caso de infección grave, los síntomas pueden aparecer también en el envés de la hoja y, dependiendo de la especie, en otros órganos de la planta por encima del suelo.
Además del oídio, el cultivo de hortalizas, frutas y plantas ornamentales también es atacado por el mildiú. Se trata -al igual que el oídio- de un nombre colectivo para un grupo de enfermedades que afectan a las partes aéreas de las plantas en diversos cultivos. La diferencia entre ellas es la localización de los síntomas: en el caso del oídio, la capa blanca aparece en la parte superior de las hojas, y en el caso del mildiu velloso - más a menudo en el envés de las hojas. En el haz de la hoja sólo se aprecia una decoloración amarilla. La diferencia más importante es que el mildiu velloso está causado por oomicetos, es decir, organismos similares a los hongos, y no por hongos, por lo que el oídio y el mildiú velloso deben combatirse con otros preparados.
En la horticultura profesional, el oídio ataca con mayor frecuencia a los siguientes cultivos oídio de las cucurbitáceas (Podosphaera fusca, Golovinomyces orontii) oídio de la frambuesa (Pseudoidium neolycopersici) oídio de la frambuesa (Podosphaera macularis) oídio de los arándanos (Podosphaera macularis) oídio del arándano (Podosphaera myrtillina).
La enfermedad se desarrolla en condiciones de mayor humedad, aunque ésta no tiene por qué ser tan elevada como en el caso de otras enfermedades fúngicas. Para su desarrollo, basta con una cantidad mínima de humedad: el rocío de la mañana o las gotas que quedan en la planta después del riego. Las condiciones óptimas para los patógenos que causan el oídio son también la insolación y la temperatura superior a los 20 °C. El cultivo se infecta más a menudo con restos vegetales o herramientas infectadas.
Lo ideal siempre, es no llegar a que el cultivo esté totalmente infectado por mildiu.El desarrollo de la enfermedad en el cultivo puede prevenirse incluso antes de que aparezcan los primeros síntomas. ¿Cómo se previene el mildiu? Hay una serie de consejos para la prevención del mildiu:
En el caso de un cultivo infestado, las partes infectadas de la planta y las hojas ya caídas deben eliminarse sin demora para evitar la propagación de las esporas del hongo.
Una sustancia muy utilizadapara el tratamiento de mildiu es el azufre*, que tiene un eficaz efecto preventivo. Interfiere en el proceso energético del metabolismo de los hongos del oídio, provocando la muerte del micelio. Como el azufre tiene un efecto de contacto, es importante que el tratamiento sea preciso para que cubra toda la planta. Los preparados a base de compuestos de cobre, también son muy eficaces para prevenir el desarrollo del oídio. Recuerde que a pesar que el azufre es un agente natural, es altamente tóxico, su manejo y aplicación ha de hacerse con todas las medidas de seguridad posibles.
* Revise la legislación vigente en su país para saber qué fitosanitarios están permitidos.
Es importante que para el uso de fitosanitarios y Biocidas el usuario debe cumplir con las normativas de registro correspondiente que se han impuesto en cada país. El uso de fitosanitarios y Biocidas se debe hacer de una forma segura. Antes de utilizarlo lea detenidamente el etiquetado del producto, instrucciones de uso y la hoja de seguridad o ficha técnica del producto. Su posibilidad de venta dependerá del registro y condiciones del país en cuestión.